El referéndum que decidió la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE) abre un período de incertidumbre tanto para el nuevo encaje británico en el continente, como para la sostenibilidad de un bloque que ha perdido a la segunda economía del proyecto comunitario.
La euforia de los partidarios del Brexit que catalogaron la jornada como el "Día de la independencia británica", contrasta con la negativa reacción de los mercados.
La derrota de la permanencia significó a su vez un terremoto político en el gobierno de Londres, puesto que el primer ministro David Cameron había apostado por seguir en la UE. Tras el resultado, el mandatario anunció que dimitirá en octubre.
De momento, los mercados han evidenciado las secuelas del escenario que se abre en el bloque occidental: la divisa británica ha caído a niveles inéditos desde 1985.
Junto a la resolución de una profunda crisis política-económica en casa, el Gobierno tendrá que resolver un proceso administrativo sobre el que no hay precedentes (sólo sucedió con Groenlandia hace más de 30 años).
Por otra parte, a escala europea, el temor es que la partida británica genere un efecto dominó entre otros integrantes de los Veintiocho.
"Un paso contra la oligarquía"
El politólogo estadounidense James Petras dialogó con Radio Universidad para describir su impresión del acontecimiento político.
Según el especialista, el Brexit fue la respuesta de un grupo variado de sectores que reúne tanto intereses populares de izquierda como sectores derechistas y nacionalistas.
"Es un paso contra la oligarquía, los banqueros alemanes y los ingleses que dominan las economías y los programas sociales (...) La austeridad es un instrumento que la Unión Europea utilizó para destruir Grecia y debilitar España, Portugal, Irlanda, etc. La reacción es contra esas medidas oligárquicas", apreció Petras al programa Cara y Cruz.
Según el norteamericano, muchos países empezarán en cadena a hacer lo mismo que hizo Reino Unido.
"Es la desintegración de la unión oligárquica europea (...) Las clases populares y los sindicatos en Francia han declarado que deben seguir este paso. Los obreros deben presionar para salir de la UE y luego atacar las oligarquías locales que tratarán de aprovechar la separación para que ellos puedan imponer sus propias medidas", estimó.
Petras describe la situación como un primer paso hacia la reorientación de las economías europeas que responda a una -cada vez más- marcada polarización entre las clases.
De hecho, el gran sector proletario y las áreas con menos ingresos fue donde más fuerte fue el voto por irse de la UE.
"Divorcio anunciado"
El periodista de política internacional Mariano Saravia calificó como positiva la votación de Gran Bretaña en tanto evidencia una situación ya existente: la división de europa.
"La medida es positiva en tanto que sincera una situación: el fracaso de la Unión Europea. Son países que nunca llegaron a ensamblar, sólo se toleraron. Hay muchos desajustes, con un centro formado por Berlin y Bruselas, y una periferia mucho más pobre. Eso hace eclosión", valoró el especialista del multimedio universitario.
Saravia además tildó de "error garrafal" regalar el triunfo electoral a la extrema derecha.
"El fracaso del arco civilizado de la política europea, un poco más de izquierda o de derecha, da lugar a extremismos", sostuvo.