Con elecciones internas de candidatos presidenciales en los estados de Vermont, Alabama, Alaska, Arkansas, Colorado, Georgia, Massachusetts, Minnesota, Oklahoma, Tennessee, Texas y Virginia, demócratas y republicanos buscar definir sus candidatos para reemplazar a Barak Obama.
El multimillonario Donald Trump parte como favorito en las primarias republicanas y la ex secretaria de Estado, Hillary Clinton, en las demócratas.
La también ex primera dama es favorita en casi todos los estados que votan hoy, con la excepción de Massachusetts y Vermont, donde, según las encuestas, se impondría Sanders.
En las primarias republicanas, Trump ganaría en casi todos los estados con la excepción de Texas, donde ganaría el ultraconservador Ted Cruz, que es senador de ese estado.
Una contundente victoria en el "Supermartes" podría allanar el terreno para Trump y Clinton hacia la nominación de sus respectivos partidos.
Del lado republicano, estarán en juego 595 delegados en 11 estados de los 2.472 delegados que habrá en julio en la Convención Nacional Republicana y hoy se disputarán casi la mitad del número de delegados necesario para asegurarse la nominación republicana.
Del lado demócrata, Clinton y Sanders lucharán por 865 delegados de los 4.763 que habrá en julio en la convención de ese partido y estará en juego alrededor de un tercio del número necesario de delegados para ganar la nominación del Partido Demócrata.
Además, para los demócratas habrá 150 "superdelegados" adicionales en juego. Los superdelegados son miembros del partido que son capaces de decidir por sí mismos a quién apoyan en la convención y que no están obligados a votar por quien salió elegido en las primarias de su estado.
En julio, ambos partidos celebrarán convenciones nacionales, en las que los delegados elegirán formalmente a los candidados presidenciales que competirán en noviembre en las urnas.
Hasta ahora, Trump ha obtenido 82 delegados, Cruz 17, Rubio 16 y el neurocirujano Ben Carson cuatro.Por otro lado, Clinton ya suma 544 delegados y Sanders 85.
Para ganar la nominación republicana, un precandidato necesita lograr el apoyo de 1.237 delegados y para ser el candidato demócrata es necesario conseguir 2.383 delegados.