El periodista especializado en temas internacionales, Pedro Brieger, opinó sobre la visita que realiza el presidente de los Estados Unidos en Cuba, luego de 88 años que un mandatario de aquel país no pisara la isla y tras 56 años de bloqueo.
El modo en el que se ha desarrollado esta apertura en las relaciones bilaterales entre ambos países, desde finales de 2014 hasta esta hoy, significan para Brieger un "un gran triunfo de la Revolución Cubana".
Si bien todo está sucediendo y el propio periodista aclara que derivar en conclusiones aún es muy apresurado, justificó esta observación señalando que hasta acá se materializa cada vez más el fracaso de la estrategia norteamericana contra Cuba: "Desde 1960 Estados Unidos se puso como objetivo destruir la Revolución y no lo logró. Lo reconoció el propio Obama cuando en diciembre de 2014 dijo que tras 50 años de aislamiento, no llegaron al resultado pretendido: destruirla".
De acuerdo al análisis de Brieger, Barack Obama ha cedido en todo este proceso sin que Cuba también lo haga en algún aspecto: "Los opositores republicanos no están contentos con esto al igual que algunos opositores cubanos, que viven en la isla o fuera, porque se legitima la dirección del actual gobierno cubano", expresó en comunicación con el programa Nada del Otro Mundo.
Aclarando que no hay información o documentación oficial que pudiera certificar el grado de participación del papa Francisco en este importante avance, el periodista señala que las visitas del Sumo Pontífice a ambos países influyó tanto como los incesantes pedidos de Unasur y Celac a la culminación del bloqueo: "Esto mejora las relaciones de Obama con América Latina".